Crear contenidos online atractivos puede ser un reto. Las exigencias de la producción de entradas de blog, publicaciones en las redes sociales, boletines electrónicos y textos de páginas web pueden parecer interminables. Existe la tentación de copiar y pegar un texto para utilizarlo en todas estas plataformas o de compartir el texto completo con las demás plataformas o compartir el texto completo de un sermón reciente.
Establecer un proceso de redacción centrado en el público le ayudará a producir un contenido bien pensado y adaptado a sus necesidades, y le conducirá a un mayor número de publicaciones, contenido reflexivo y adaptado, y dará lugar a piezas escritas más exitosas. Por "exitoso" me refiero a un contenido que la audiencia quiera leer en su totalidad porque le atrae porque les atrae de manera significativa. Esto les impulsará a responder y actuar.
CONSIDERE A SU PÚBLICO
Antes de empezar a escribir, tiene que identificar a su público y la mejor plataforma para llegar a ellos. Luego, tómese un momento para ponerse en el lugar de sus lectores. Piense:
- ¿Qué quieren leer? ¿Necesitan información detallada sobre una actividad o es más probable que anhelen una voz de paz y aliento?
- ¿Se ha tomado un momento para rezar para que su perspectiva habite en sus pensamientos mientras escribe?
- ¿Cuánto tiempo le dedicarán a su contenido? ¿Están ocupados, haciendo ya malabares con demasiadas exigencias, con sólo unos segundos disponibles para escanear un correo electrónico, o están viviendo o viven la vida a un ritmo más lento que les permite dedicarse a un largo artículo de la web?
- ¿Cómo consumen estas personas la información? ¿Su público se tomará el tiempo de visitar su blog para leer una entrada? Dado que, de todos modos, pasan mucho tiempo en las redes sociales, ¿debería compartir allí trozos cortos de contenido fácil de digerir? Una vez que le tome un tiempo para descubrir estos aspectos de su audiencia, ¡es la hora de crear!
GENERAR IDEAS
La página en blanco puede ser la peor pesadilla de un escritor. Tener una nueva idea puede parecer imposible y puede que incluso tener la sensación de estar atascado. Desengánchese:
- Abandonar, pero no por mucho tiempo. Si su plazo de entrega se lo permite (¡espero que sí!), deje de intentar forzarse a crear a la carta, a crear por encargo. Salga a dar un paseo, respire profundamente y piense en un entorno completamente nuevo. O, simplemente, inténtalo de nuevo al día siguiente.
- Descubra sus horas clave de creación. ¿Cuándo fluye su energía de forma natural a un alto nivel? En mi caso, a primera hora de la mañana, cuando mi mente no ha sido influenciada por el estrés diario, el contenido de los medios de comunicación y las exigencias de mi calendario.
- Cuando descubra cuál es su mejor momento para concentrarte y explotar su creatividad, esfuércese siempre por escribir durante ese tiempo. Márquelo en su calendario para considérelo una prioridad.
- Descargue de ideas. A veces su mente está demasiado llena para concentrarse. Prepare dos hojas de papel. En la primera, escriba una lista rápida de todo lo que lo distrae: tareas que tiene que hacer o cosas que lo estresan. En la segunda, anote los puntos e ideas que necesita incluir en su escrito: Esta lista puede convertirse en el esquema de contenido que le ayudará a empezar.
ESCRIBIR LAS PALABRAS
Tengo la sensación de que en el corazón de cada clase de escritura hay una lección clave: póngase a hacer esto. Simplemente sentarse y escribir. Resístase al impulso de editar y autocriticar sobre la marcha. Cree un borrador completo de su obra, y luego vuelva a leerlo. Haga ajustes y léalo de nuevo. Asegúrese de tener en cuenta la plataforma para la que escribe y la longitud para asegurar un buen número de lectores. Cuando tenga un borrador sólido, es el momento de estudiarlo un poco más a fondo.
APROVECHE SU HUMILDAD
Como ya he dicho (espero que con delicadeza) el contenido no es realmente sobre usted, sino sobre tu audiencia, pasemos a la parte más difícil del proceso: la edición. Yo mismo edito muchos de mis escritos y puede ser bastante difícil convencerme de que debo eliminar frases o párrafos enteros, pero es una parte necesaria para crear un buen contenido.
En primer lugar, vuelva al punto de partida y una vez más, tenga en cuenta a tu público. ¿Su escrito satisface todas sus necesidades? ¿Querrán leerlo? ¿Pueden leerlo en el tiempo que le dedicarán a su contenido? Tómese un momento para ajustar cualquier cosa que no que no satisfaga a su público.
Ahora, hemos llegado a la parte favorita de mi proceso de autoedición: la lectura en voz alta. Cuando trabajo desde casa, mi familia suele oírme hablar solo y esta es la razón. Leer el texto en voz alta ayudará a consumirlo de forma diferente porque lo escucha y experimenta lo que se siente al decir lo que estás tratando de comunicar. Su obra escrita no debe parecer un sermón hablado, sino más bien una conversación amistosa con el lector.
¿Hay alguna frase que sea difícil de leer? ¿Hay errores ortográficos o gramaticales? ¿Una palabra muy larga que le haga tropezar? ¿Ha utilizado la misma palabra diecisiete veces en la pieza? En medio de un párrafo demasiado largo, ¿se ha perdido la concentración? Perdido?
Descubrirá todas esas cosas, y muchos otros puntos problemáticos, cuando lea en voz alta. Anótelo y tómese su tiempo para seguir editando hasta que el texto fluya bien, se adapte a la plataforma para la que está escribiendo, sea fácil de consumir y de relacionar, y parezca que va a satisfacer las necesidades de su público.
¡PUBLIQUE!
¡Lo ha conseguido! Una vez que su pieza esté lista, es hora de compartirla. Y si tiene la capacidad seguimiento de los análisis de los lectores y la respuesta, esto le ayudará a entender mejor la reacción de la audiencia y el compromiso para la próxima vez, dándole información adicional. Lo que le ayudará a tener en cuenta en el primer paso del proceso.
Tanto si ha tardado una hora como una semana en completar su artículo, siéntase orgulloso del viaje. Disfrute de la sensación de logro, se lo merece.
Laura Buchanan es especialista en contenidos creativos en United Methodist Communications.