En el principio, cuando Dios hizo su creación,
Un viento se precipitó sobre las aguas,
Un aliento calentó el vacío oscuro,
Un espíritu produjo la creación.
Dios dio de gracia:
Que haya luz para que todos vean,
Que haya agua para que todos chapaleen en ella,
Que haya vida en medio de la muerte.
Y Dios invitó y nos invita a que respondamos con gozo.
Fue bueno,
Fue asombroso e impresionante,
Es bueno.
Este artículo originalmente fue publicado en inglés por la Junta General de Ministerios de Discipulado. Escrito por el Rev. Nathan Decker de la Conferencia Anual de Virginia. Traducción y adaptación por Humberto Casanova. Contaco: recursosmetodistasunidos@umcom.org.